Contraescena es una comedia creada desde diferentes miradas sobre la mujer artista. Y así, este singular trío saldrá de gira tratando de llevar adelante la privilegiada tarea que supone haber sido consagradas por la crítica y el público.
Será en sus camerinos, donde la intimidad de las artistas se desvele como ContraEscena del espectáculo: Abandonadas por el amor, alejándose de los hijos y de la casa, calmando con pastillas las ansiedades que produce la convivencia y, sobre todo, cuidando del éxito… ¿serán capaces de sobrevivir a su propia historia?
Lenguaje Teatral de la música de Cuerda para ContraEscena
The Funamviolistas cautivan al espectador contando una historia, su historia, sin palabras. Gestos y movimientos sincronizados de modo riguroso con el canto y la música instrumental configuran un lenguaje poderoso y eficaz. El violín, la viola y el contrabajo se alían con las protagonistas hasta convertirse en recursos privilegiados de la acción, de la narración y de la expresión dramáticas. Los instrumentos se hacen prolongación de la voz, de las manos o del cuerpo; melodías, incisos y comentarios de las cuerdas que expresan o enfatizan la alegría, el miedo o la tristeza.
En el encuentro y el diálogo entre instrumento, cuerpo, voz, gestos y movimientos se halla, tal vez, el origen de la armonía escénica y del aura que desde el escenario envuelve al espectador.
The Funamviolistas tejen su propia banda sonora con material extraído de fuentes y estilos musicales variados: repertorio clásico y música de grupos y compositores actuales, música de cine o sintonías televisivas, temas de jazz, tangos y música popular de distintas latitudes... Ellas aportan arreglos musicales propios, adaptados a las voces e instrumentos del trío.
De este modo, el sonido se hace cómplice del gesto. Lo acompaña, lo expresa y lo trasciende. Lo hace inolvidable. Es magia del arte funamviolista.
